Hepapro es un complemento alimenticio formulado con N-acetilcisteína (NAC), cardo mariano y cúrcuma Cursol. Hepapro ha sido formulado para personas con altos niveles de estrés oxidativo o que consumen o han estado expuestas a sustancias tóxicas.
El hígado es necesario para llevar a cabo una gran cantidad de funciones dentro del organismo, como el metabolismo de toxinas y fármacos, la digestión, así como la producción y almacenamiento de sustancias vitales. Existen trastornos hepáticos, que pueden ocurrir por diferentes motivos; autoinmunes, como resultado de la exposición a fármacos y sustancias tóxicas, virales o como consecuencia de lesiones físicas o funcionales crónicas.
Entre los principios activos que pueden ayudar a normalizar la función hepática y combatir la hepatotoxicidad se encuentran aquellos que promueven el aumento de la síntesis de antioxidantes endógenos o ayudan a controlar el estrés oxidativo.
Propiedades y composición de Hepapro:
N-acetilcisteína (NAC):
El NAC promueve una mayor síntesis de antioxidantes endógenos. Su consumo ayuda a controlar el estrés oxidativo en el organismo de otras maneras. Es una forma interesante de aumentar nuestro poder antioxidante endógeno en situaciones de mayor estrés orgánico.
Cuando se toma NAC, la cisteína actúa como agente limitante en la síntesis de glutatión, específicamente sobre los metabolitos que han generado el efecto tóxico.
Cardo mariano:
El cardo mariano es una planta utilizada tradicionalmente en diferentes regiones de Asia, Europa e India.
Sus principales efectos se deben a su contenido en silimarina. La silimarina tiene una mezcla de principios activos, el más importante de los cuales es la silibinina. La silibinina es la responsable de sus principales efectos.
Se ha informado que la silimarina tiene algunos efectos positivos sobre el control metabólico, el colesterol y las enzimas hepáticas que pueden verse alteradas. Como resultado, tomar silimarina puede ayudar a controlar la disfunción hepática y el estrés oxidativo, así como a reducir los principales síntomas de la degeneración de la función hepática.
Cúrcuma (Cursol®):
La cúrcuma es una planta utilizada por sus amplias propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Se trata de un polifenol que se encuentra en la raíz de la planta, que se ha utilizado en la medicina tradicional desde tiempos inmemoriales. Está patentado Cursol, lo que garantiza su calidad y biodisponibilidad.
Los efectos de la cúrcuma sobre algunas enzimas hepáticas y el estrés oxidativo se han informado previamente en la literatura científica.